En lo más profundo de un lejano valle, bajo un enorme árbol, había una diminuta casa. La casa tenía debajo una base secreta. En la base secreta experimentaban con niños. Los niños tenían mucha capacidad mental. La capacidad mental era increíble. Eran increíbles hasta que murieron. Murieron pero sus espíritus se quedaron dentro.Dentro, los científicos decidieron abandonar toda la base. La base quedó abandonada y quince años más tarde llegó un equipo de exploración formado por: Jimy, Rome, Jesús, Jeremías, Andy y Dani. Dani era el capitán y se metieron dentro. Dentro había un botón, lo tocó Jeremías y dejaron salir a los espíritus. Los espíritus los seguían con unos ojos rojos y brillantes y sus nombres eran: El Torso, La Dama Marchita, El Aniquilador, El Martillo y El Chacal. El Chacal se llevó a todo el quipo menos a Daniel. Daniel cogió su metralleta y se abrió camino por toda la base.
La base era muy grande y oscura, Daniel se paró y vio a un espíritu y disparó a El Torso. El Torso desapareció y Daniel se fue y en el centro se la base encontró una máquina. La máquina tenía un botón negro. Al pulsar el botón negro, se dio la vuelta y todos los espíritus se pusieron alrededor de la máquina y desaparecieron. Cuando desaparecieron, Daniel encontró a sus amigos y se fueron a sus casas felices.
Autor: Daniel Pérez Domínguez




